El valor de los tlacuiloque

Una querella de los pintores-escribanos indígenas en el siglo XVI

Yolanda Yépez

Dentro del Códice Cuetlaxcohuapan se menciona la defensa que hizo fray Martín de Valencia de los tlacuiloque (plural de tlacuilo) de Cuetlaxcohuapan (en donde luego se fundaría la ciudad de Puebla), en el que exige a los señores principales de Tlaxcala el pago justo por los servicios de aquellos pintores-escribanos. Ante ello, determinaron dar unas tierras a los mencionados indígenas como retribución a su trabajo.

Fray Martín de Valencia logró un acuerdo ante el corregidor de Tlaxcala, Hernando de Saavedra, en Cuetlaxcohuapan, en donde a los tlacuiloque se les concederían unas tierras obtenidas durante la Conquista. Debido a que se realizó ante la autoridad correspondiente, el corregidor, este asunto tuvo carácter oficial y se utilizó como testimonio en asuntos judiciales.

El Códice representa en distintos planos el desarrollo de la cuestión. Debajo del texto se encuentra un escribano de su majestad, Juan Sánchez, en su escritorio registrando los pormenores del hecho, así como otros personajes, entre ellos Alonso de Saucedo. En la parte central, se muestra el encuentro entre fray Martín y el corregidor, sentado en una silla de caderas, lo cual denota su autoridad; los dos están identificados con sus nombres.

En el fondo de esa escena se ve una construcción en forma de torre que parece ser lo que hoy es conocido como Rollo de Tepeaca. En la parte inferior izquierda se pueden ver a varios indígenas; uno está identificado como Juan Tlacuilotecutli, y al parecer es el líder de los tlacuiloque. Detrás de él se encuentran otros dos indios tlacuiloque; abajo están representados tres indígenas con sus nombres: Sebastián Chichimecayaotequihua, Chalchiutecatl y Antonio Tizapanecatl, y en la parte inferior de este último aparecen veinte círculos de color verde, tal vez en referencia al pago a los pintores.

Por último, podemos ver la representación de los indígenas principales tlaxcaltecas con sus nombres. En esta parte se muestra a un intérprete y se infiere, por la inscripción que se observa a su lado, que es Diego Nahuatlato, quien porta una tilma y pantalón; sus rasgos podrían denotar su origen mestizo.

Un documento frágil 

Entre los documentos pictográfico-alfabéticos del siglo XVI se encuentra el llamado Códice Cuetlaxcohuapan, uno de los textos escritos en náhuatl en los que se trata un asunto determinado; en este caso, la formulación de una queja, en la que se reproduce el diálogo de quienes tomaron parte en el hecho. Este documento se encuentra en la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia desde 1919, y perteneció a la Colección del Museo Indiano de Lorenzo Boturini.

Para conocer más de esta historia, adquiera nuestro número 183 de enero de 2024, impreso o digital.